El artículo titulado “El sensus fidei: principio de sinodalidad en la vida de la Iglesia”, publicado en el diario Tribuna do Norte y escrito por Mons. João Santos Cardoso, Arzobispo de Natal, reflexiona sobre el “sensus fidei” en la configuración de la sinodalidad dentro de la Iglesia. Este concepto teológico, definido como un “instinto de fe” otorgado por el Espíritu Santo a través del bautismo, se presenta como un medio para discernir las verdades del Evangelio y fortalecer la comunión del Pueblo de Dios con sus pastores.
Mons. Santos Cardoso, conocido por su contribución al pensamiento eclesial, aborda el tema desde una perspectiva enraizada en los documentos oficiales de la Iglesia, como el Documento Final del Sínodo. Su texto refleja un esfuerzo por articular la dimensión comunitaria de la fe, donde el “sensus fidei” no es una opinión subjetiva ni una imposición jerárquica, sino una sensibilidad espiritual compartida por los fieles.
Este enfoque pone de relieve el carácter inclusivo y participativo de la sinodalidad, resaltando la responsabilidad de los pastores de escuchar y discernir las inspiraciones del Espíritu manifestadas en la comunidad.
El “sensus fidei” como núcleo de la sinodalidad
El autor argumenta que el “sensus fidei” es la base de la sinodalidad, definida por la comunión, participación y corresponsabilidad de todos los bautizados. Al señalar que este instinto espiritual no depende de la erudición ni de consensos sociales, remarca su carácter divino y su rol en la formación del “consensus fidelium”. Este último, descrito como la concordancia colectiva en materia de fe y moral, es un criterio seguro para confirmar la autenticidad doctrinal.
Una de las ideas centrales del texto es que el “sensus fidei” no sustituye el discernimiento pastoral, sino que lo complementa, ofreciendo un equilibrio entre la autoridad jerárquica y la participación comunitaria.
El “sensus fidei” es presentado por Mons. João Santos Cardoso como un don esencial para la vida sinodal de la Iglesia, capaz de renovar su misión evangelizadora y fortalecer su unidad. El análisis, aunque breve, ofrece una base teológica sólida, pero, al mismo tiempo, de fácil acceso para cualquier lector, de modo que, en última instancia, este texto invita a reflexionar sobre cómo la Iglesia puede caminar unida hacia el Reino de Dios, integrando la diversidad de sus fieles bajo la guía del Espíritu Santo.
Le invitamos a leer el artículo completo de Mons. João Santos Cardoso en Tribuna do Norte.
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