Jaime Spengler: “La autoridad no viene del poder sociológico, sino del testimonio ético, moral y religioso”

Jaime Spengler: “La autoridad no viene del poder sociológico, sino del testimonio ético, moral y religioso”
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El arzobispo de Porto Alegre y presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) y del Consejo Episcopal Latinoamericano y del Caribe (CELAM), fue uno de los participantes en la rueda de prensa del 8 de octubre. Expresó su sorpresa por el nombramiento cardenalicio, que recibirá el 8 de diciembre en el Vaticano, pero al mismo tiempo recordó uno de los principios de su vida: “nunca decir que no a lo que la Iglesia me pide”. También agradeció al Papa Francisco la confianza depositada en él.

Testigos más que maestros

Al referirse a la sinodalidad en América Latina y el Caribe, Spengler destacó que “hoy, la cuestión de la autoridad en la sociedad y en el mundo es un tema decisivo”, afirmando que “estamos viviendo un momento de crisis de las democracias”, y junto con ello “una crisis de las instituciones de mediación en la sociedad, tanto a nivel internacional como global, y también a nivel continental”. En este sentido, el arzobispo de Porto Alegre hizo un llamamiento a recordar las palabras de Pablo VI: “El ser humano escucha hoy con mucha más atención a los testigos que a los maestros, y si escucha a los maestros es porque son testigos”. Desde esta perspectiva, subrayó que “la autoridad no viene del poder sociológico, sino del testimonio ético, moral y religioso”.

Inculturación de los ritos litúrgicos

En cuanto al Rito Amazónico, una posibilidad en discusión, el presidente de la CNBB se refirió a la realidad de muchas comunidades de la Amazonía, donde la celebración eucarística tiene lugar una vez al año, o incluso menos. El Rito Amazónico está siendo estudiado por la Conferencia Eclesial de la Amazonia (CEAMA), resaltó. Dijo que el Rito Romano “debe ser inculturado en las diferentes realidades”, algo que requiere una sensibilidad especial. Recordando la diversidad de pueblos, culturas y lenguas, el futuro cardenal habló de la importancia de un rito para la región, poniendo como ejemplo la Eucaristía celebrada en la Asamblea de la CEAMA en 2023, en la que indígenas sirvieron en el altar en diversos papeles. Destacó la dignidad, la reverencia, el modo y el cuidado con que los indígenas llevaron a cabo lo que formaba parte del rito, “con una dignidad que a veces no sentimos ni presenciamos en nuestras celebraciones, por solemnes que sean”.

Fenómenos climáticos en Brasil

La Asamblea Sinodal está abordando el tema de las relaciones, y en esta perspectiva, el presidente de la CNBB, ante la realidad climática que se vive en Brasil y en otros lugares del planeta, dijo que en el grupo en el que participa se ha tocado este aspecto, viendo que el Instrumentum laboris habla de la relación horizontal y vertical, trascendente, “pero quizás ha faltado la relación con el medio ambiente, con la casa común, un aspecto que necesitamos tener presente en las discusiones de estos días”. Habló de la dramática situación que vive Brasil, con incendios y sequías en la Amazonía, y de su conversación con el arzobispo de Manaos, el cardenal Leonardo Steiner, en la que le informó de que no ha podido visitar algunas comunidades cuyo único acceso son los ríos, ahora secos.

Frente a esto, Jaime Spengler enfatizó: “el mundo, la naturaleza, está pidiendo ayuda, y nosotros estamos llamados a cuidar de la naturaleza, no porque podamos perecer por falta de cuidado del medio ambiente, de los residuos que producimos, de las transformaciones que estamos presenciando”. Considerando esto muy importante, subrayó que “el cuidado que estamos llamados a desarrollar hacia el medio ambiente tiene un grado aún mayor de dignidad, este medio ambiente, esta vida, este Planeta, no es fruto del trabajo humano, es divino. Y por eso, todo cuidado, toda promoción es necesaria”.

El presidente de la CNBB hizo hincapié en la pregunta del Papa Francisco: “¿Qué mundo queremos dejar a nuestros hijos, a nuestros nietos, a los que vendrán después de nosotros?” Insistió en que “el futuro está en manos de Dios”, pero también en que la nueva forma de vivir “depende de nuestras opciones, de nuestras decisiones, de nuestras opciones”, lo que exige una corresponsabilidad evangélica con efectos en la sociedad y en el futuro mejor en la vida de los que vendrán después de nosotros.

Misión que construye la sociedad

Sobre la misión en la Iglesia, tema de la Segunda Sesión de la Asamblea Sinodal, el presidente de la CNBB destacó el papel sobresaliente en la evangelización de Brasil y de América Latina desempeñado por los que llegaron de otras regiones, afirmando que “si hoy tenemos una tradición cristiana vigorosa, se lo debemos a los inmigrantes”, incluso ante las muchas dificultades que sufrieron, que superaron con “determinación, coraje y sobre todo fe, que les dio la fuerza para construir una sociedad de la que hoy somos partícipes»”. También destacó la importancia de la Iniciación a la Vida Cristiana, tema tratado en el sínodo.

Puntos de encuentro para la transmisión de la fe

Spengler considera que el gran desafío de la Iglesia es llegar a la gente con la fe. Afirmando que el camino no está claro, dijo que ese es el trabajo del Sínodo, poniendo como caminos el diálogo, la escucha, la sensibilidad ante las diferentes realidades, buscando “puntos de convergencia ante el desafío de transmitir la fe hoy a las nuevas generaciones”, algo que exige apertura de corazón y capacidad intelectual y espiritual de los participantes en la asamblea. Hablando de la Conferencia Episcopal Brasileña, con más de 450 obispos y una gran asamblea general, que llegó a definir casi como un Sínodo, ve estos encuentros como un Pentecostés, en el que personas de diferentes culturas y lenguas consiguen alcanzar puntos de convergencia para responder a la realidad política, social y eclesial actual.

Riqueza en la diversidad del Colegio Cardenalicio

El arzobispo de Porto Alegre se refirió a la tragedia vivida en Rio Grande do Sul en mayo, con ciudades completamente devastadas, lo que exige construir de otra manera. Destacó la ola de solidaridad nunca vista en Brasil, que debe pasar a la historia, sin olvidar que también aparecieron las peores actitudes. Habló de la catolicidad de la Iglesia, que tiene que ver con “la generosidad y magnanimidad propias de Dios, capaz de dialogar con todas las diferencias, culturas, realidades y pueblos”. Ve en la diversidad del Colegio Cardenalicio una “expresión de este modo característico de ser católico”, destacando la preocupación del Papa Francisco por las distintas realidades, manifestada en la universalidad de este colegio, “somos tan distintos, pero hay algo que nos une, y ahí radica la belleza, la grandeza y la dignidad del propio colegio”.

Parresía ante la ordenación de hombres casados

Ante la posibilidad de ordenar a hombres casados y que el CELAM retome el tema, su presidente dijo que, aunque es un asunto delicado, “se trata de una cuestión de disciplina eclesiástica, no de una cuestión teológica”. Contó la experiencia de un obispo de la Amazonía que, tras crear una prelatura, sólo contaba con un sacerdote para una Iglesia local de enorme tamaño. Ante esto, dijo que “es una realidad que hay que analizar”, refiriéndose a la posibilidad de que hombres casados ejerzan el ministerio ordenado en el grado de presbíteros, algo que dijo no saber si sería la mejor solución.

El presidente del CELAM pidió parresía para tratar este asunto, afirmando la posibilidad de esta ordenación de hombres casados para una comunidad concreta. “Esto requeriría parresía de todos nosotros, capacidad de apertura de corazón, es un tema en el que sí tenemos que avanzar”, aunque reconoció que el camino no está claro. Aun así, “podemos y debemos abordar esta cuestión con valentía”, teniendo en cuenta los aspectos teológicos, bíblicos, de la Tradición de la Iglesia, pero también atentos a los signos de los tiempos, algo que hicieron los apóstoles en busca de respuestas a distintas necesidades.


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